Kuala Lumpur

No quiero escribir un post equivocado sobre Kuala Lumpur. Y creo que este no es el que le corresponde… No quiero descubrir nada, quiero que lo hagas tú primero. No quiero estropearte la sorpresa… o la desilusión.

Seguramente esta ciudad merezca más tiempo. Una segunda oportunidad. Ese periodo de adaptación que necesita todo lugar con el que no tengas un flechazo.

Pero allá va;

Estás aquí y el nombre KUALA LUMPUR te dice cosas. Una de las principales ciudades de Malasia. Te dice Torres Petronas, icono mundial, te dice edificios altos y te dice carreras de Fórmula 1.

Y sí, Kuala Lumpur es esto:

Pero también es esto:

Una mezcla entre caos y orden.

Por una parte tecnología, modernidad, buenos medios de transporte, centros comerciales gigantes y abarrotados…

Todo el lujo y la ostentación frente al lowcost.

Su barrio chino, su Little India, la excelente experiencia gastronómica que ofrece, uno de los puntos más populares y atrayentes de Malasia, con su comida típica callejera. Esas calles que se transforman, más tranquilas durante el día y bulliciosas cuando llega la noche…

Para nosotros… Ha sido una ciudad de paso. Y es que una de sus cosas más positivas, es que sirve de base para llegar a todos los puntos de Asia. La amplia variedad de destinos que ofrece AirAsia y las buenas comunicaciones te facilitan el camino.

Pero sin lugar a dudas, si tuviese que destacar algo de Kuala Lumpur, lo que más ha llamado mi atención, sería su multiculturalidad.

Y es que la identidad de sus habitantes proviene de diferentes orígenes. Malayos, chinos e indios conviviendo, formando la estructura social de la ciudad. Puedes encontrar también tailandeses, indonesios, vietnamitas… con sus diferentes creencias religiosas y estilos de vida. Hay que verlo y vivirlo.

Kuala Lumpur es todo esto. Y seguramente mucho más.

Para nosotros… es la ciudad que nos dio un respiro. Nos recibió tras muchos días sin descanso y calor extremo. Nuestro nuevo host, una de esas personitas que hacen el mundo más bonito, nos dio todas las facilidades del mundo, y el clima nos regaló una maravillosa tormenta tropical que refrescó nuestros días.

Kuala Lumpur nos dio una pequeña tregua. Seguro que a ti puede darte mucho más.